Otra película de terror (o volviendo a los 90…)
Publicado el 27/07/22 a las 6:00 am
Por Cristian Scarrone
¿Te acordás de lo que pasaba cuando tenías algún accidente doméstico grave? ¿Te acordás cuando enfermabas y te dolía todo? ¿Te acordás cómo llegabas a una puerta de emergencia?
Llamabas a algún vecino que tenía locomoción, parabas un taxi, aunque no tuvieras como pagarlo, en bus o caminando y si no podías te quedabas en tu casa esperando que no pasara lo peor.
Costó mucho trabajo poder tener un sistema de atención médica de emergencia. Sin duda todavía hay muchas cosas por mejorar, pero es imprescindible tener siempre claro los objetivos y trabajar con una buena gestión que comprenda la salud como un derecho, y no un privilegio de algunos pocos, que coloque como objetivo principal la calidad asistencial y la prevención, trabajando en conjunto con la IM y las distintas unidades ejecutoras. Sabemos que podemos tener un sistema de calidad con personal calificado llegando en los tiempos justos a cada domicilio, pero para eso debemos tomar los caminos correctos y no mirar para el costado.
Ahora, en el marco de la expansión hacia el interior de SAME 105, esta se da no con personal genuino sino una vez más, con tercerizaciones. La dirección nos informa que se inaugura una nueva base de salida en Rivera, ¡pero con ambulancia y personal tercerizado! Esta inauguración es la primera de un plan piloto que consiste en crear bases en el interior pasando de un sistema metropolitano a nacional.
Si bien entendemos que SAME 105 debe llegar a todos los lugares del país, lo que no compartimos es la forma en que se lleva a cabo, a través de la precarización del trabajo y por ende precarización del servicio. Las tercerizaciones hoy y siempre, van contra los y las trabajadoras e impactan en los usuarios que son quienes se ven afectados por un servicio que debería ser de calidad.
Por un lado, inauguran estructuras nuevas que quedan inoperativas por falta de recursos humanos y equipamiento, Ciudad de la plata, Parque del Plata, Migues, Canelones, Juan Lacaze son solo algunos ejemplos donde las ambulancias quedan paradas sin poder usarlas mientras que, en Montevideo, que es donde se concentra el mayor número de consultas, no hay ambulancias en condiciones para trabajar. Son 4, o a veces 5 ambulancias las que están operativas en Montevideo para toda la población metropolitana. Esto genera inevitablemente la incapacidad de respuesta a los miles de llamados que hoy reciben compañeros y compañeras de la central telefónica, quienes la mayoría de las veces no pueden mandar el móvil al usuario que lo necesita para atender su salud.
Insistimos, no se trata de tener móviles parados por todo el Uruguay sin poder ser usados por falta de recursos o personal, mientras que en Montevideo hace meses estamos reclamando y denunciando que precisamos móviles para trabajar, para cumplir con un servicio, hace meses que no se llega a poder cubrir el 70% de las consultas fruto de esta situación.
Estas políticas de recorte y tercerización, destruyen el sistema de atención médico ni más ni menos en un área tan sensible como es la Emergencia.
La salud es un derecho humano y debemos protegerlo. Detrás de esa defensa nos encontramos trabajadores y trabajadoras organizadas de la salud.
Arriba los y las que luchan.