El compromiso de y con Elena Quinteros

Publicado el 09/06/16 a las 5:05 pm

A 40 años del secuestro y desaparición de la maestra Elena Quinteros, la Cámara de Diputados homenajeó a la luchadora social. Luis Puig del Partido por la Victoria del Pueblo, principal orador, extendió el reconocimiento a otras víctimas del Terrorismo de Estado, en particular recordó a Gerardo Gatti, dirigente sindical desaparecido el 9 de junio de 1976.
Al repasar la vida de compromiso de Elena Quinteros, joven maestra, destacó su participación en las jornadas sociopedagógicas que la llevaron al encuentro con los sectores de uruguayos en el interior del país que vivían en las peores condiciones.
Puig relató los hechos ocurridos el 28 de junio de 1976, cuando Elena Quinteros llevó adelante un plan de fuga. Después de varios días de detención Elena convenció a sus captores que tenía que hacer un contacto con otra persona en las cercanías de la embajada de Venezuela en la que tenía pensado refugiarse para pedir asilo político. La maestra, vigilada desde cerca, logró correr y acceder a una casa lindera desde donde saltó a los jardines de la representación diplomática y gritó pidiendo ayuda. “Está en territorio venezolano”, dijo Puig, antes de citar el relato de Raúl Olivera y Sara Méndez que cuenta que Quinteros fue derribada antes de lograr entrar a la residencia de la embajada y los secuestradores la arrastraron hacia afuera, forcejeando con funcionarios diplomáticos venezolanos. Este hecho desencadenó la ruptura de relaciones diplomáticas de Venezuela con Uruguay.
Puig desarrolló la «enorme» tarea de denuncia a nivel internacional realizada por la madre de Elena, María Almeida de Quinteros, a quien todos conocemos como Tota.
Refirmando la denuncia frente a la impunidad Puig recordó la aparición de un documento de la cancillería uruguaya que reconoce la existencia de un memorándum “en el cual se analizaba qué hacer” con la maestra, y “la conveniencia de entregarla o no al gobierno venezolano”.
«Toda esta trama de complicidades», dijo Puig, confirmó la responsabilidad del entonces ministro Juan Carlos Blanco, quien fue el primer procesado por crímenes de lesa humanidad en el país.
El legislador reclamó que el Estado debe investigar y juzgar: «A lo largo de estas décadas quienes han llevado el peso en la investigación y la denuncia han sido las víctimas y sus familiares. La acción de inteligencia e investigación le corresponde al Estado».
Comparando la acción de la política de derechos humanos en Argentina, Puig dijo, que «se ha avanzado un 10% de lo que se avanzó en Argentina». El legislador del PVP culminó su intervención reafirmando el compromiso por el «Nunca más» y por la «Verdad y Justicia».
Después de la exposición de Puig, hicieron uso de la palabra Daniel Radío (Partido Independiente), Graciela Bianchi (Partido Nacional), Walter Verri (Partido Colorado) y Eduardo Rubio (Unidad Popular); Carlos Varela, Gerardo Nuñez y Pablo González (Frente Amplio).
El homenaje culminó con una moción de reconocimiento al trabajo social de Elena Quinteros aprobada por aclamación y cerrada con un aplauso cerrado del pleno de la Cámara.