Reconstruyendo una señal perdida.
Publicado el 08/03/14 a las 8:08 am
Mensaje de Sara Méndez a las mujeres.
Queridas mujeres:
Hoy es 8 de marzo y este es un día en que se nos “conmemora”. A veces sin saber mucha gente, el por qué de esta fecha. Se nos recuerda como madres, como trabajadoras, como esposas, como amigas, reivindicando siempre la fase de lucha, de resistencia, de fuerza casi para soportar lo insoportable. Más de una vez, sé que sentimos que eso encubre una concepción, que no quiere, que no permite que la mujer, se revele y exija otras condiciones. Pero no es este tema, el que me motiva.
Es transmitirles en breves frases, que yo conocí a este género del cual formo parte, en un penal de presas políticas, donde compartí, con cientos de ellas 5 años.
Muchas otras actividades de mi vida las había realizado en grupos, donde la mayoría, casi siempre, éramos mujeres. Sin embargo, es en ese lugar, el penal de Puntas Rieles, conviviendo en situaciones, a veces, casi extremas, comprendí y reivindiqué a La Mujer, y me reconocí, con mi propio género. Pude en esa reconstrucción de los años ya vividos, encontrar, hilos, a veces casi invisibles, pero que habían forjado procesos fundamentales de mi vida y de un acontecer políticos y social, que iban mucho más allá de mí tiempo.
No fue sólo ese contexto impuesto por el represor que obligaba a racionalizar las experiencias para conservar la razón, sino el ámbito creado, por cientos de mujeres que pasaron por la cárcel que nos hizo, mirarnos a nostras mismas, y reconocer la fuerza para resistir la dictadura con solidaridad, inteligencia y alegría que supimos forjar, aún en las situaciones más extremas. En lo personal allí me di cuenta que mi concepción hasta entonces era la del mundo machista en que me había formado, pese a mis definiciones de izquierda revolucionaria.
Luego, la experiencia en los grupos de Familiares, en ese entonces, formados, casi exclusivamente por mujeres, tanto acá como en otros países, nos volvió a mostrar, que la mujer poseía un potencial que hasta ahora no se le ha reconocido.
¿Por qué este relato de mi experiencia personal?
Porque en este último tiempo siguiendo a una mujer, fui comprendiendo y reconstruyendo, una señal perdida, que para mi fueron claves para emprender un camino de compromiso social. Hablo de Constanza Moreira, candidata a la presidencia por el Frente Amplio.
Cada una de sus oratorias nos está trayendo conceptos fundamentales que constituyeron nuestra izquierda socialista y los desmenuza ofreciéndonos una deliciosa comida, que jóvenes y viejos devoramos con el hambre de quienes tienen, tenemos, la necesidad y los deseos de seguir andando. Porque con su gesto y oratoria, está volviendo a reconstruir sentimientos y valores descaecidos en una práctica política que rehúsa la discusión, y que ha ido perdiendo en función del manido consenso, su fuerza y su poder de convencer que los cambios son posibles.
Vale acercarse y escuchar a Constanza, la mujer, que como otras en la historia, a pesar de las adversidades, han mostrado el camino con su señal de mujer, también aquí, de valor, inteligencia y alegría.