domingo 12 de enero, 2025

DE CONSULTAS POPULARES Y APOYOS POLÍTICOS

Publicado el 26/04/24 a las 6:37 am

Por Raúl OLIVERA

En estas mismas fechas, pero hace 35 años, ocurrieron en el Uruguay dos hechos importantes vinculados precisamente a un acontecimiento del mismo tenor que el que está ocurriendo actualmente a partir de la iniciativa de reforma constitucional sobre aspectos del sistema de Previsión Social.

En abril de 1989, tenía lugar la votación del referéndum contra la Ley de Caducidad, y un par de días antes, un acto antidemocrático llevado a cabo por el presidente Sanguinetti en contubernio con los canales privados de televisión.
Muchos de los que tendrán que expresarse en las próximas elecciones, en caso de que se validen por la Corte Electoral las firmas que se entregaran el próximo 27 de abril, cuando ocurrieron esos dos hechos de hace 35 años aún no habían nacido. De los actuales 4 precandidatos del Frente Amplio, Carolina tenía 27 años, Mario 23, Yamandu 21 y Andrés 16.
No pretendemos sacar todas las conclusiones políticas posibles sobre esa etapa de la vida del país, sino solo anotar algunos elementos que permitan buscar y encontrar enseñanzas entre ambas situaciones. Se trata de experiencias vividas por la sociedad uruguaya, no solo separadas por el tiempo, sino también por generaciones distintas y liderazgos políticos también distintos, que hacen necesario que nos remitamos a recordar, traer a la memoria.
En 1989, era el referéndum contra la ley de caducidad, redactada, votada en el parlamento y que usó para su ratificación en la consulta popular todos los recursos, inclusive el ilegitimo y repudiable recurso de la censura. Es decir, casi con los mismos apoyos políticos que actualmente incorporaron esta reforma regresiva al régimen de la Previsión Social.
A diferencia de esa de 1989, en la actual iniciativa de consulta populares, el llamado “campo popular” o “bloque de los cambios” en el que compartiendo ciertos objetivos generales comunes desde el Congreso del Pueblo de 1965 se articulan las fuerzas de la izquierda social y política, se encuentra fracturado, no solo a la hora de firmar o no la papeleta, sino en los acentos que se ponen para justificar sus posiciones futuras.
Cuanto tiene que ver eso, con el alejamiento y el divorcio que se ha autocriticado el Frente Amplio de las organizaciones sociales, seguramente deberá ser analizado en algún momento a partir de que se constaten sus consecuencias, con el diario del lunes.
Para los partidarios de la impunidad en 1989 y los impulsores de la Reforma actual del sistema de jubilaciones, lograr triunfar en sus objetivos es una pieza importante y fundamental de un proyecto de sociedad que creemos no tiene puntos de coincidencia con el de la izquierda. Por esa razón, cualquier cosa que pudiera contribuir, consciente o inconscientemente, a diluir o confundir esa diferencia sustancial, debería ser tenido en cuenta muy seriamente.
Para traer a la memoria e ilustrar a las nuevas generaciones, trascribimos una parte de un libro actualmente en preparación en el que justamente apuntamos a reconstruir aspectos sobre nuestro pasado.


Para los partidarios de la impunidad lograr triunfar en el referéndum que tendría lugar en abril de 1989 era fundamental. Sanguinetti, en la imposibilidad constitucional de ser el paladín en contra del “voto verde”, le traspasa esta responsabilidad a Enrique Tarigo, que había sido su compañero de fórmula, para que fuera el vocero del “voto amarillo” en el referéndum. Pese a contar con los recursos del Estado, en ese momento, las cosas no rodaban bien para blancos y colorados coaligados en la defensa de los violadores a los derechos humanos. Tarigo grababa innumerables anuncios hablando a favor de reafirmar la ley que amparaba a los militares. Desarrollaba cómo España había perdonado a uno y otro bando para salir del franquismo, y varios otros ejemplos. También hay que recordar que la ley que establecía el recurso de referéndum contra las leyes debía ser reglamentado, por lo que la mayoría parlamentaria de blancos y colorados, con excepción de aquellos parlamentarios que no la apoyaban, aprovecharon para establecer algunos requisitos que les dieran ciertas ventajas, como que los votos en blanco serían computados como una expresión en contra de la derogación de la ley de caducidad. Mientras, a nivel jurídico se debatía sobre las consecuencias legales que implicaría la anulación de la ley de caducidad en caso de triunfar el referéndum.
Para Sanguinetti era muy importante el triunfo en el referéndum, porque de no lograrlo, tendría un enorme problema institucional. Pero ese papel de tener que ser el gran enemigo del voto verde, a Tarigo lo fue desgastando. Los partidarios de anular la Ley de Caducidad con mucho esfuerzo y pocos recursos daban la pelea en un mano a mano con la población. Eso preocupaba al gobierno, que no se ahorraba usar cualquier recurso, entre ellos, la acción del Movimiento Todos por la Patria (MTP) contra el cuartel militar de La Tablada, en la Provincia de Buenos Aires, el 23 de enero de 1989, que fue acompañada en el Uruguay con un simulacro de La Tablada donde las Fuerzas Armadas, sin aviso, atacaron un cuartel como parte de una forma de entrenamiento por el referéndum.
En las jornadas previas a la votación, el “voto verde” hacía mucho más ruido y las encuestas indicaban que se aproximaba peligrosamente a ser la mayoría. Cada día, descontaba diferencia. Sanguinetti estaba muy preocupado y, cuanto más inquieto, más eran los avisos que le hacía hacer a Tarigo. Las cámaras de Canal 10 siempre se encontraban prontas para filmar por orden de De Feo. En la residencia presidencial se reunían los publicistas asesores (de la Corporación Thompson) también con José Luis Guntin1, un hombre de confianza de Tarigo.

Durante la última jornada en que se podía realizar publicidad, es decir, dos días antes del referéndum, por la mañana temprano Guntin fue convocado de forma urgente desde la Presidencia para que concurriera al edificio Libertad. En el séptimo piso y en el despacho del presidente lo esperaban Sanguinetti; Tarigo; Miguel Ángel Semino, secretario de la Presidencia; Jorge de Feo; el ingeniero Horacio Scheck, de Canal 12 y Walter Nessi, prosecretario de la Presidencia.
Lo que ocurrió allí es relatado por el propio Guntin en su libro “La vida te da sorpresas”2:

“Apenas terminé de saludarlos, el presidente me dijo que estaban deliberando acerca de un aviso, un tape, que el día anterior, a última hora, había llegado a los canales proveniente de la Comisión pro Referéndum.
“Queríamos que lo vieras y nos dieras tu opinión”, me dijo Sanguinetti. Le contesté: “Bueno”, e inmediatamente salí detrás de Nessi a mirarlo.
Me llevó, yo lo seguía, a una sala repleta de televisores, monitores y aparatos de video. Me senté frente a uno que él me indicó e hizo rodar la publicidad en cuestión.
Aparecía en la pantalla una señora que inmediatamente reconocí. Era Sara Méndez y en el tape hablaba de su tragedia y la de su hijo, Simón Riquelo, desaparecido años atrás. Hablaba con mucha calma, mirando a la cámara, y contaba su dolor de madre de no saber dónde estaba su hijo. Y afirmaba que el triunfo del “voto verde” podía ayudar a que lo encontrase, porque las circunstancias de su desaparición se investigarían más a fondo. Y que, por eso, ella le pedía a quienes la escuchaban que votaran “verde” el domingo próximo, para que ella pudiera reencontrarse con su hijo. Todo dicho de un modo muy convincente.
Le pedí a Nessi que me lo dejara ver varias veces. Lo más impactante del aviso era que, después de hablar Sara Méndez, cuando ella se quedaba callada, la cámara continuaba filmándola unos cinco segundos en silencio.
Su cara, su angustia, sus deseos de recuperar a su hijo, su dolor, estaban todos en esos instantes en que ella no hablaba, pero que seguía en pantalla.
Después de la quinta vez en que lo pasó, lo miré y le dije a Nessi: “Está muy bueno”. Entonces, él me dijo que tenía otro proyecto de comercial que quería mostrarme. “Dale”, le contesté.
Ahí me llevó a otro monitor y lo encendió. Comenzaron a aparecer las imágenes y el audio.
Se trataba de otro aviso, no muy acabado. Se refería a la muerte de Pascasio Báez, el peón rural que asesinaron los tupamaros, con total sangre fría, en una
“tatucera” cercana a Pan de Azúcar, simplemente porque podía advertir a los uniformados lo que había visto por casualidad.

Pero el spot filmado era largo y confuso. No estaba bien estructurado, y aunque por supuesto eso se podía arreglar, no era un aviso para nada efectivo si se pasaba solamente durante una jornada. El otro, el de Sara Méndez, sí.
Se lo dije enseguida al prosecretario. Él quedó un poco desanimado ante mis palabras, porque creía que con este comercial neutralizaría el efecto del otro. Le expresé que, para mí, no sería así. El aviso de Sara Méndez era muy efectivo en un único día de salida al aire, el otro no. No le quise señalar que el suyo estaba confuso y mal realizado, porque ése no era el punto, pero le aseguré que, en mi opinión, era muy superior el efecto de la pieza enviada por la Comisión pro Referéndum. El contraaviso no servía de nada. Walter me miró con cara de desilusión y me dijo que volviéramos al despacho del presidente para que yo les expresara mi opinión.
Volvimos. Seguían las mismas personalidades sentadas en torno de la misma mesa. Todas las miradas se centraron en mí, cuando me senté en un lugar libre.

Sanguinetti me preguntó qué me habían parecido ambos video-tapes. Contesté, más o menos, lo que le había dicho a Nessi. Que el de Sara Méndez me parecía muy efectivo, aunque se pasara durante un único día; y que el otro, el de Pascasio Báez, no servía de nada, resultaba muy confuso y que, aunque se mejorara, no tendría efecto alguno en una única jornada de proyección.
Los rostros de todos los presentes se tensaron. ¡Qué problema se les había aparecido el día previo al receso publicitario!
Hubo un minuto de silencio en la sala. Por fin, alguien me preguntó si me parecía que con ese aviso podía triunfar el “voto verde”. Les pregunté qué decían las encuestas sobre la diferencia existente ahora.
“Ganamos por poco”, me contestó alguien. “¿Cuánto es ese ‘poco’?”, repliqué. “Unos puntos”, oí decir.
“Entonces, este aviso puede hacer que gane el voto “verde”, les expresé. El silencio y los rostros preocupados aumentaron. Lo rompió De Feo, quien le habló directamente al presidente.
Le dijo que si era así, bastaba una palabra suya para que esa publicidad no apareciese en ninguno de los canales. Lo miró a Scheck, quien asintió. “Hablamos ahora con Hugo Romay y ninguno de los avisos aparece. Podemos argumentar que llegaron tarde a los canales y que ya teníamos las tandas completas”, expresó De Feo entusiasmado.
Sanguinetti lo miró y nos miró a todos con cara preocupada. El silencio se hizo más denso en su despacho. Nadie hablaba. Era el turno de que el presidente decidiera qué hacer.
Demoró en hablar y, cuando lo hizo, le manifestó a De Feo que sí, que se hiciera así, que no saliese el aviso de Sara Méndez. Lo dijo en tono muy bajo, apenas se oyó, pero sí de forma concluyente.
De Feo inmediatamente se dirigió al teléfono a llamar a Romay y todos nos fuimos levantando de la mesa para retirarnos.
Yo estaba impactado por lo que había presenciado. Un presidente constitucional había prohibido una publicidad de la oposición. Sin motivo válido alguno. Sólo para no poner en riesgo el resultado de la votación y salvarse de un grave problema institucional.

Me impresionó mucho, pero me quedé callado. ¿Qué podría haber hecho?, me preguntaba después, cuando me alejaba del edificio Libertad. ¿Decir que era una barbaridad antidemocrática? No me animé. Preferí el cómodo silencio.
Quienes no se quedaron en silencio fueron los perjudicados, los censurados. De lo que voy a contar no fui testigo, pero lo sé por las periodistas de Búsqueda. El día de la prohibición del aviso, concurrieron a este semanario la propia Sara Méndez y el señor Hugo Cores a denunciar lo sucedido. Búsqueda lo consignó y Arbilla denunció ante la SIP esta censura de prensa. Creo que en esos tiempos todos creían que había sido acción exclusiva de los canales privados de televisión. No sabían de la participación directa del presidente Sanguinetti que acabo de relatar.
Tres jornadas después, el “voto amarillo” aventajó al “verde” por un margen no muy grande. Sanguinetti respiró tranquilo y también todos los que lo rodeábamos (…).”

14/4/2024

Notas

  1. Guntin fue redactor responsable del semanario Opinar, hombre de confianza del Dr. Enrique Tarigo, senador suplente y subdirector del diario El Día. Candidato del partido colorado a diputado en 1994. Director del Canal 5 durante la administración de Sanguinetti. ↩︎
  2. Libro publicado por la editorial Fin de Siglo en abril de 2010. ↩︎

PHVsPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF8zMDBfYWRzZW5zZTwvc3Ryb25nPiAtIDwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2FkXzMwMF9pbWFnZTwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cud29vdGhlbWVzLmNvbS9hZHMvd29vdGhlbWVzLTMwMHgyNTAtMi5naWY8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF8zMDBfdXJsPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy53b290aGVtZXMuY29tPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYWRfaW1hZ2VfMTwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eS93cC1jb250ZW50L3RoZW1lcy9nb3RoYW1uZXdzL2ltYWdlcy9jb21wYS80eDAxLmpwZzwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2FkX2ltYWdlXzI8L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXkvd3AtY29udGVudC90aGVtZXMvZ290aGFtbmV3cy9pbWFnZXMvY29tcGEvNHgwMi5qcGc8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF9pbWFnZV8zPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5L3dwLWNvbnRlbnQvdGhlbWVzL2dvdGhhbW5ld3MvaW1hZ2VzL2NvbXBhLzA5LmpwZzwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2FkX2ltYWdlXzQ8L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXkvd3AtY29udGVudC90aGVtZXMvZ290aGFtbmV3cy9pbWFnZXMvY29tcGEvMTAuanBnPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYWRfaW1hZ2VfNTwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eS93cC1jb250ZW50L3RoZW1lcy9nb3RoYW1uZXdzL2ltYWdlcy9jb21wYS8xMS5qcGc8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF9pbWFnZV82PC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5L3dwLWNvbnRlbnQvdGhlbWVzL2dvdGhhbW5ld3MvaW1hZ2VzL2NvbXBhL3RyYW5zLnBuZzwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2FkX3VybF8xPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5PC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYWRfdXJsXzI8L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXk8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF91cmxfMzwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eTwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2FkX3VybF80PC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5PC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYWRfdXJsXzU8L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXk8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19hZF91cmxfNjwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eTwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2Fkc19yb3RhdGU8L3N0cm9uZz4gLSB0cnVlPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYWx0X3N0eWxlc2hlZXQ8L3N0cm9uZz4gLSByZWQuY3NzPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fYXV0b19pbWc8L3N0cm9uZz4gLSBmYWxzZTwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2Jsb2NrX2ltYWdlPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5L3dwLWNvbnRlbnQvdGhlbWVzL2dvdGhhbW5ld3MvaW1hZ2VzL2JhbmRlcmFfcHZwLnBuZzwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2Jsb2NrX3VybDwvc3Ryb25nPiAtIGh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eTwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2NlbnRlcmVkPC9zdHJvbmc+IC0gdHJ1ZTwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2NvbnRlbnRfZmVhdDwvc3Ryb25nPiAtIHRydWU8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19jb250ZW50X2xlZnQ8L3N0cm9uZz4gLSB0cnVlPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fY3VzdG9tX2Nzczwvc3Ryb25nPiAtIDwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2N1c3RvbV9mYXZpY29uPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy5wdnAub3JnLnV5L3dwLWNvbnRlbnQvd29vX3VwbG9hZHMvMy1mYXZpY29uLmljbzwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2ZlYXR1cmVkX2NhdGVnb3J5PC9zdHJvbmc+IC0gRGVzdGFjYWRhcyBIb21lPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fZmVlZGJ1cm5lcl91cmw8L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXkvZmVlZDwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2dvb2dsZV9hbmFseXRpY3M8L3N0cm9uZz4gLSA8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19pbWFnZV9kaXNhYmxlPC9zdHJvbmc+IC0gZmFsc2U8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19pbWFnZV9oZWlnaHQ8L3N0cm9uZz4gLSA1MDA8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19pbWFnZV93aWR0aDwvc3Ryb25nPiAtIDUwMDwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX2xvZ288L3N0cm9uZz4gLSBodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXkvd3AtY29udGVudC93b29fdXBsb2Fkcy80LWJhc2UuanBnPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fbWFudWFsPC9zdHJvbmc+IC0gaHR0cDovL3d3dy53b290aGVtZXMuY29tL3N1cHBvcnQvdGhlbWUtZG9jdW1lbnRhdGlvbi9nb3RoYW0tbmV3cy88L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19wb3B1bGFyX3Bvc3RzPC9zdHJvbmc+IC0gU2VsZWN0IGEgbnVtYmVyOjwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX3Jlc2l6ZTwvc3Ryb25nPiAtIHRydWU8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19zaG9ydG5hbWU8L3N0cm9uZz4gLSB3b288L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb19zaW5nbGVfaGVpZ2h0PC9zdHJvbmc+IC0gMTUwPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fc2luZ2xlX3dpZHRoPC9zdHJvbmc+IC0gMTUwPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fc3Vja2VyZmlzaDwvc3Ryb25nPiAtIHRydWU8L2xpPjxsaT48c3Ryb25nPndvb190aGVtZW5hbWU8L3N0cm9uZz4gLSBHb3RoYW0gTmV3czwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX3RodW1iX2hlaWdodDwvc3Ryb25nPiAtIDIwMDwvbGk+PGxpPjxzdHJvbmc+d29vX3RodW1iX3dpZHRoPC9zdHJvbmc+IC0gMjAwPC9saT48bGk+PHN0cm9uZz53b29fdXBsb2Fkczwvc3Ryb25nPiAtIGE6Mjp7aTowO3M6NTU6Imh0dHA6Ly93d3cucHZwLm9yZy51eS93cC1jb250ZW50L3dvb191cGxvYWRzLzQtYmFzZS5qcGciO2k6MTtzOjU4OiJodHRwOi8vd3d3LnB2cC5vcmcudXkvd3AtY29udGVudC93b29fdXBsb2Fkcy8zLWZhdmljb24uaWNvIjt9PC9saT48L3VsPg==