Juan Geymonat: “En Uruguay el capital está mal distribuido y extranjerizado”
Publicado el 31/05/21 a las 6:55 am
Por Ana María Mizrahi
Juan Geymonat, licenciado en Trabajo Social y máster en Historia Económica, dijo a LARED21 que “de un total de 167 mil empresas, 200 concentran el 25% de la producción y a la vez 100 de ellas son extranjeras”. Señaló también, que producto de la alta desigualdad, el debate sobre este tema ya comenzó en muchos países y que el objetivo es que también se abra en Uruguay.
Se puede decir que en Uruguay existe profusa información de quiénes son y donde están los pobres, sin embargo no sucede lo mismo con aquellas personas y familias que detentan riqueza ¿Cómo fue dicha investigación?
La propuesta nos la hizo FUCVAM. Vimos la necesidad de poner este tema en el debate. No forma parte de la agenda de investigación de la Universidad, pero hay investigadores que se dedican al tema. Fuera del ámbito académico, no se discute esta temática. La apuesta de FUCVAM fue “vamos a discutir esto, pongámoslo en la discusión de la sociedad”. El libro es la construcción de varios autores que, de distintas ópticas, disciplinas y abordajes, miramos la misma realidad de distintos ángulos. Esa parte de la realidad, son los ingresos concentrados y los grupos que concentran esos ingresos. El problema recurrente, ha sido el acceso a la información. La información está dispersa, es deficitaria, hubo dificultades para reunirla y eso ha sido el común denominador para todos los que hicimos la investigación.
¿Quiénes son esas personas y esas familias ricas del Uruguay y donde se ubican dentro del territorio nacional?
Las principales fuentes de donde provienen los altos ingresos, son las rentas de capital y las rentas en general. Está muy relacionado el nivel de ingreso con la propiedad del capital ¿Qué sabemos de la propiedad del capital? Lo primero es que está muy mal distribuido, está muy concentrado en pocas empresas. Hay 200 empresas que concentran una cuarta parte de la economía nacional. En el Uruguay hay unas 167 mil empresas, es decir que 200 concentran el 25% de la producción. A su vez, de esas 200 la mitad son extranjeras. El capital se distribuye mal y está extranjerizado, principalmente en la cúpula empresarial. Cuando vemos el gran capital nacional, lo que tenemos son empresas de control familiar, es decir no tienen mil accionistas todos distintos, son bastante cerradas en su paquete accionario, que a su vez está compuesto por descendencia familiar. Esto quiero decir que desde principio de siglo hasta acá, no entró nadie al club de empresarios, no hay movilidad, pero hay cierta estabilidad, pero también continuidad de grandes familias de empresarios. Algunas son de cuarta o quinta generación.
¿De dónde proviene esa riqueza?
Las principales fuentes del 1% más rico son las rentas del capital y las rentas en general. Es la posesión de riqueza, a diferencia de la otra parte de la sociedad que sus ingresos dependen del salario, no tienen riqueza, ni patrimonio. (Proviene esa riqueza de) Las rentas de capital, es decir invertir en negocios que dan determinada ganancia. Luego están las rentas de cuando tenés un inmueble y lo arrendás. Lo más paradigmático es la renta de la tierra, aquellas personas que por ser propietarias de tierra poseen un ingreso. La renta de la tierra –aparece en el libro, en un capítulo escrito por el ingeniero agrónomo Gabriel Oyhancabal- si calculás la magnitud de la renta agraria equivale al 40% de todo el PBI agropecuario. Cuando observás quién se apropia de esa renta, se encuentra que hay terratenientes que a su vez son empresarios, que son quienes invierten en la producción y que tienen una parte importante de esa renta. Hay un 37% de esa renta que va a manos de gente que no invierte en el campo, no desarrollan una actividad agropecuaria. Son propietarios de la tierra y la arriendan a terceros. Que hay dentro de ese 37%, situaciones muy variadas, está el veterano que tiene 200 cuadras de campo y las arrienda para redondear una jubilación, pero están grandes empresas que compran tierras para arrendarla, por ejemplo lo que hace UAG empresa de la que formaba parte el senador (Partido Nacional) Juan Sartori. Tienen decenas de miles de hectáreas en arriendo. Hay fideicomisos financieros que han invertido en eso para arrendar, no para producir y vivir de la renta de la tierra.
¿Cuánto del ascenso social depende de la herencia, el esfuerzo personal de las personas, y la educación que reciben?
Hay un artículo en el libro muy interesante, pertenece a Evelin Lasarga (magíster en economía) que analiza las herencias. La herencia está peor distribuida que el ingreso y que la riqueza. Si sumas todo lo que se hereda, está muy concentrado en una porción muy pequeña de la sociedad. El 83% de los negocios que se heredan, los hereda el 1% de la población. Lasarga, en su artículo hace un ejercicio en el cual, mediante un modelo econométrico, lo que intenta ver es en la posesión de riqueza que incide más, el hecho de haber nacido en un hogar “heredero”, o la inversión educativa que hubo en el hogar, lo que da ese ejercicio es que hay mayor incidencia en haber nacido en un hogar “heredero”. Lo que demuestra, no es que la educación no importe a la hora de obtener mayores ingresos, pero pesa mucho más haber nacido en un hogar “heredero”. Esta investigación derriba la teoría de la “meritocracia”, suponiendo que la gente tiene que ser remunerada de acuerdo al esfuerzo que realiza, lo que queda es que un mismo esfuerzo en distintos puntos de partida, los resultados serán distintos. No es lo mismo correr una carrera de 1.000 metros empezando en el metro 0, que correrla empezando en el metro 500, iguales esfuerzos tendrán resultados distintos.
En el imaginario colectivo está que aquellas personas que detentan riqueza es producto de su esfuerzo personal, mientras aquellas que son pobres es porque no se esforzaron lo suficiente ¿este imaginario existe?
Está instalado y pesa cada vez más, se identifica la pobreza como un problema individual, hay encuestas que se han hecho y miden la percepción de la gente sobre las causas de la pobreza, y la gente ve la pobreza como el producto de trayectorias individuales y no como un problema estructural. La contraparte de eso es que quienes tienen altos ingresos es porque “se rompieron el lomo”, se esforzaron y si criticás es porque sos un “resentido”. Es la justificación de un grupo social que necesita justificar esa diferencia social.
Hay países que tienen políticas impositivas de fuerte carácter redistributivo, incluso hay países donde se legisla sobre la participación en la propiedad de las empresas. Cuando las empresas superan determinado tamaño, se exige que abran a la participación de los trabajadores dentro del paquete accionario, por ejemplo.
¿La desigualdad y la acumulación se corrigen con políticas públicas?
Entiendo que sí, otros países lo han hecho. Hay países que tienen políticas impositivas de fuerte carácter redistributivo, incluso hay países donde se legisla sobre la participación en la propiedad de las empresas. Cuando las empresas superan determinado tamaño, se exige que abran a la participación de los trabajadores dentro del paquete accionario, por ejemplo. Porque si la propiedad se distribuye mal, se piensan mecanismos para distribuir mejor. No estoy hablando de Corea del Norte o Cuba, sino países como Alemania, Finlandia y Suecia. Hay que afectar parte de los ingresos que están concentrados y eso genera resistencias. Cuando se quiso poner un impuesto al agro, durante el gobierno encabezado por José Mujica, hubo mucha movilización en contra, incluso se lo declaró inconstitucional. Intentar afectar los altos ingresos, tiene una respuesta inmediata de quienes los detentan.
¿En la investigación la mayoría de los que detentan riqueza son hombres y blancos, pesa el género y la raza?
El dato étnico no lo tengo, tiendo a pensar que sí, la aproximación de género es así. El economista Mauricio De Rosa, en su artículo le da que del 1% más rico, en su mayoría son varones, si lo miras por el lado de la propiedad del capital y la participación de las mujeres en los directorios de las empresas, es muchísimo menor que la de los hombres y que, no solo es menor sino si comparás, en el directorio las mujeres son muy pocas y en algunas empresas ni siquiera las hay. Si ves quienes dirigen los directorios de las empresas, son todos hombres prácticamente, no hay mujeres. Hablamos de las grandes empresas. Decíamos que los negocios de los grandes capitales nacionales eran de carácter familiar. Y la lógica familiar es fuertemente patriarcal. Los que heredan los negocios, los que quedan a cargo de las empresas son varones. Incluso cuando la descendencia es una mujer, al frente de la empresa queda el yerno del propietario original, no queda la hija.
En la publicación se señala que hay 589 asentamientos donde viven unas 165 mil personas, sin embargo, la tierra que ocupan es menor al que ocupan 90 barrios privados ¿Podrás explicar cómo es exactamente?
Es la cristalización en el territorio de la desigualdad. Todos los asentamientos irregulares del Uruguay entran en los 90 barrios privados que hay y aún te sobran 1.750 hectáreas. Estos barrios privados, están deshabitados buena parte del año porque se utilizan para veranear. Estos barrios privados están ubicados en la trama urbana de Montevideo y Canelones, y en varios departamentos del país.
Está muy presente en el país las transferencias que reciben las personas de menores ingresos ¿Las personas, las empresas de mejores ingresos, reciben exoneraciones significativas por parte del Estado o en realidad pagan altos impuestos?
Existen exoneraciones tributarias, la principal es a través de la Ley de Inversiones, que exonera cuando hay una inversión con determinadas características. Eso es cada vez más laxo, por el solo hecho de invertir ya reciben exoneraciones. Cuando invertir es lo común de cualquier empresa. Los ingresos que están gravados por IRPF, el IRPF prevé un escalonamiento en el esfuerzo tributario de las personas sobre el ingreso. Sin embargo, quién tiene una empresa grande, va y compra un auto y lo usa como si fuera de la empresa, ese auto que compra con la plata de la empresa no forma parte de su ingreso personal. Ahí hay una zona gris ¿cuánto se tributa en estos casos? No queda claro. En el Uruguay, por la ley de mecenazgo, a las empresas se les descuenta IRAE si donan a determinadas instituciones. Este es un privilegio que tienen las empresas y no el resto de los ciudadanos. Una persona no elige donde van sus impuestos, sin embargo, los empresarios que tributan IRAE pueden elegir a donde van sus impuestos, porque pueden descontarlo poniéndolo en actividades que entienden importantes como por ejemplo: la construcción de un liceo como el Jubilar, o Impulso, entre otros, que se financiaron de esa manera. Este dinero que debería entrar al Estado no entra, porque el empresario elige donde va esa parte de sus tributos. Hay diferencia entre el asalariado y las empresas a la hora de tributar.
¿El objetivo de la publicación es abrir un debate?
Sí queremos que se abra el debate. El libro está escrito en un lenguaje llano, sin quitarle profundidad analítica. En distintos lugares del mundo, este debate ya comenzó, y tiene que ver con el alto nivel de desigualdad a la que hemos llegado y se ha agravado en las últimas décadas. Intentamos acercar argumentos sólidos, respaldados científicamente, sobre cuestiones que muchas veces son conversaciones de “boliche”, pero no tienen el rigor necesario.