8 de marzo, día de la mujer
Publicado el 13/03/20 a las 6:31 am

Eugenio Petit , Concejal municipal de Carmelo
Hoy es un día muy especial para nosotros y estamos profundamente conmovidos. Es el último marzo en que vamos a tener la oportunidad de hacer en forma pública consideraciones vinculadas con el mes en que se homenajea a la mujer. Yendo de lo general a lo particular.
Empezamos diciendo que el 8 de marzo, no es un día de festejo. Desde el fondo de la historia tenemos ejemplos de mujeres que han dado la pelea para que se les reconozca en sus derechos. En momentos en que es “políticamente correcto” hablar de equiparación de estos últimos, todavía nos dan una bofetada saber que las mujeres no alcanzan el 20 % de la representación parlamentaria, recinto donde se toman las decisiones que van a regir nuestras vidas… también las de ellas. También en pleno siglo XXI existe desigualdad en el acceso al trabajo y en su remuneración, donde por el simple hecho de ser mujer la paga por igual tarea que la del hombre es un 20 % inferior. Estos datos surgen de informe de la Organización Mundial del Trabajo del año 2018 y es una brecha inadmisible.
Debemos recordar que la propia conmemoración del 8 de marzo hace referencia a los hechos que sucedieron en 1908, donde murieron calcinadas 146 mujeres trabajadoras en una fábrica textil de Nueva York en incendio provocado por bombas incendiarias lanzadas contra mujeres que en aquel momento peleaban por la reducción de su jornada laboral a 10 horas y frente a las malas condiciones de trabajo que padecían. Se tuvo que esperar hasta el año 1977 para que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decretara oficialmente al 8 de marzo como el día Internacional de la Mujer.
También vivimos en un tiempo en el cual unas 40 mujeres mueren anualmente en nuestro país asesinadas por sus parejas, donde hubo que desarrollar una Estrategia Nacional para la igualdad de género para 2030 y en 2019 hubo un promedio de 108 denuncias diarias por violencia, una cada 13 minutos (física, patrimonial o psicológica, que duele a veces más que un golpe). En momentos en que muchas veces se naturaliza el abuso de poder y para muchas personas al ocurrir en el ámbito privado parece que no fuera descalificador y no hubiera que darle mayor trascendencia.
Es ahora, en 2020, en que una cantidad innumerable de colectivos sociales salen a la calle en el mundo entero contra el patriarcado que reproduce la desigualdad y contra el capitalismo salvaje que le alienta. La mayor convocatoria que existe en Uruguay es la que tienen las mujeres y el domingo próximo pasado todos pudimos apreciar imágenes de esta realidad con una marcha en Montevideo –algunos medios de comunicación calculan que se convocaron a más de 300.000 mujeres–, también en Carmelo y a lo largo y ancho de todo el país. Este es un proceso que no tiene marcha atrás y estamos profundamente convencidos de que la participación igualitaria de la mujer va a ser un factor fundamental en elevar la calidad de nuestras democracias. La lucha por el reconocimiento de sus derechos al igual que las peleas por alcanzar un Desarrollo Ambiental sustentable y compatible con la vida para no quedarnos en poco tiempo sin planeta Tierra son 2 hitos fundamentales que como sociedad tenemos por delante. En particular las y los jóvenes lo tienen muchísimo más claro que nosotros y eso nos alienta sobremanera.
Hoy en lo particular, también queremos recordar y homenajear a las mujeres en la actividad política. Terreno en disputa, donde su representación parlamentaria está acotada a menos del 20 %, y entre ministros, Secretario y Pro Secretario de Presidencia, Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Secretaria Nacional de Deporte existen al día de hoy 17 figuras que van a tomar en los próximos 5 años decisiones fundamentales para la vida de todos y cada uno de nosotros, de las cuales solamente 2 son mujeres.
Hoy, en la figura de nuestra querida Concejal Rachell queremos representar a esta lucha. Y nadie mejor que ella, quién hace 2 días deja de estar presente físicamente pero va a permanecer junto a nosotros en su ejemplo de lucha, de nobleza con sus compañeros y compañeras de agrupación política, pero también con sus adversarios (jamás enemigos), en su ejemplo de solidaridad con las y los vecinos de su ciudad, en particular de su querido Barrio Centenario, siempre con perfil bajo, trabajando como se debe hacer sin buscar falsos protagonismos donde no los debe haber. Ayer decíamos que Rachell era una figura fundamental en las sesiones del Municipio a lo largo del quinquenio y con una asistencia de un 100 % hasta que tuvo un quebranto mayor de salud. En particular, Rachell era quién más traía asuntos para tratar por fuera del orden del día. Porque bastaba que ella se enterara de que una persona o una familia atravesaban alguna dificultad para que ella trajera el tema al Municipio interpelándonos con la búsqueda de soluciones no ortodoxas, porque en teoría varios de estos asuntos que la preocupaba excedían largamente las funciones para las cuales fueron creados los Municipios. Sin embargo yo creo que al revés. Rachell le dio al Municipio de Carmelo lo que es la verdadera razón de su existencia y es que un Gobierno que se considere de cercanía debe estar siempre al lado de la gente poniendo a las personas como su centro. Cuando alguien está atravesando por alguna situación difícil es cuando más las instituciones públicas deben estar acompañándole. Por algo Rachell era una fuente increíble de información sobre cosas que pasan en nuestro territorio. Es que nadie que se haya acercado a su almacén en Barrio Centenario se iba sin una atenta escucha y una palabra de aliento. De allí a pasar a la acción el trecho era muy corto. Por eso la gente se acercaba a ella. Debemos reconocer que el resto del Concejo Municipal es conteste con lo que acabo de decir. Se lo hemos escuchado en más de una oportunidad el reconocimiento que desde su banca se ejerció en el período una oposición constructiva, aportando ideas y trabajo para los temas en que podíamos acordar porque si eran buenos para la gente eran buenos para sus representantes en el Municipio.
Vaya entonces el homenaje a Rachell y en ella a todas las mujeres que entregan lo mejor de sí en su participación en política entendiendo a esta última como una herramienta fundamental para alcanzar un mundo más justo.
Dejamos un abrazo apretado a su querida familia, a sus compañeras y compañeros de su organización política, su querido Partido Socialista y nos convocamos a todos a seguir ejemplos como el de hoy, que los hay y por suerte muchos de entrega por una causa justa.