Riesgos asociados a la ratificación del TLC con Chile y a la adhesión al PCT
Publicado el 10/11/17 a las 6:30 am
Ratificación del TLC con Chile
En primer lugar se advierte la falta deestudios que permitan evaluar las ventajas e inconvenientes a ambos tratados. Nose dispone de información sobre el impacto enlassectores y actividades afectados, de estadísticas, de información sobre los competidores, etc.
Segundo, no se ha proporcionado información detallada sobre el desarrollo de las negociaciones, la que se ha reducido a comentarios generales. Sin perjuicio de la confidencialidad, no se ha brindado un análisis exhaustivo de las posturas análisis y argumentos que dieron lugar y justifican los textos acordados.
En cuanto al TLC con Chile,no se aprecia las razones por las que se recurrió a un modelo de negociación e instrumento normativo que ha sido concebido por los países desarrollados y que ha demostrado sus desventajas cuando los países en desarrollo negocian en su marco.
La realidad muestra la posibilidad de alternativas, como lo son los tratados que ya existen con Chile en diversas materias, los que muestran la posibilidad deconducir las relaciones comerciales acudiendo a formatos flexibles y adaptados a los temas específicos a resolver.
Chile ha firmado TLCs con varios países, por lo que posee una experiencia en el manejo de ese instrumento dela que carecemos, lo cual constituye una desventaja al momento de negociar.
Sin embargo, lo más relevante es que Chile hace años viene adaptando su economía y sus empresas a un modelo de apertura coherente con la fórmula de negociación planteada por losTLCs. Hoy existen empresas chilenas con una desarrollada capacidad de actuación internacional, que va muchos pasos por delante de las uruguayas. El resultado será que empresas chilenas de gran porte ingresarán a nuestro mercado ocupando áreas relevantes del mismo y compitiendo con ventaja con las nacionales, mientras que éstas sólo tendrán posibilidades limitadas de hacerlo en el mercado chileno.
Ejemplo del grado de preparación alcanzado por Chile para enfrentar éstas negociaciones se da en la importancia asignada a las Indicaciones Geográficas en el capítulo de Propiedad Intelectual: mientras Chile presenta un listado de ellas que supone un conocimiento y estrategia definidas de su industria vitivinícola, nuestro país recurre a una enumeración que revela su falta de avance en la materia.
En su contenido el TLC con Chile consiste en un tratado de los llamados de cuarta generación, tanto por las materias que se incorporan (p.e.compras públicas, servicios financieros, comercio electrónico, propiedad intelectual), como por su metodología centrada más que en rebajas de aranceles, en establecerregulaciones sobre la actividad de importantes sectores de las economías nacionales, lo que resta libertad a los estados para adoptar las políticas que entiendan más adecuadas para su desarrollo.Ello se complementa con disposiciones que impiden retroceder en los niveles de liberalización alcanzados (cláusulas Trinquete, status quo y nación más favorecida), o con la adopción de listas negativas que condicionan las posibilidades futuras de los sectores no comprendidos.
El tratado incluye cláusulas similares a las incluidas en el rechazado TISA y a las incluidas acuerdo transpacífico de cooperación Económica, abriendo así una vía para la incorporación a los mismos.
La adopción de un tratado con éste formato, contenidos y áreas abarcadas, constituye un antecedente que resta al país posibilidades de negociación cuando en las futuras tratativas con los países desarrollados que reclamarán para ellos las mismas ventajas.
Adhesión al Tratado de Cooperación en Patentes (PCT)
No están dadas la actualidad las condiciones mínimas para que el Uruguay obtenga beneficios concretos de su adhesión al PCT, en cuanto a estímulo a la generación de conocimiento tecnológico. La ratificación del tratado en las actuales circunstancias consolidaría, y sobre todo supondría un obstáculo, para modificar la situación actual marcada por un fuerte predominio de las patentes extranjeras, especialmente las que protegen productos farmacéuticos de los laboratorios transnacionales. Se necesita generar las bases para crear las condiciones que permitan el desarrollo de tecnologías patentables nacionales, así como garantizar el acceso a los medicamentos de punta a precios y condiciones más favorables.
Los argumentos que se esgrimen en favor de del PCT no cuentan con el apoyo estudios ni realidades concretas y dan por sentado que su aprobación por si supondrá un estímulo a la investigación y el desarrollo de tecnologías propias. Lo cierto es que el país no ha definido políticas concretas en la materia, ni ha a pesar de los esfuerzos de los últimos años ha logrado generar las capacidades necesarias,yla inversión en el área no se ha incrementado, sigue sin superar el 0,5% del PIB, sin perspectivas ciertas de que llegue al 1% reclamado desde múltiples ámbitos.
Las patentes y el sistema PCT constituyen sólo una herramienta, la que debe ser usada en las circunstancias y condiciones adecuadas para que produzca el efecto deseado de generar valor comercial en base a los resultados de los procesos de investigación y desarrollo.
Por el contrario, el tratado afectará con seguridad a alguno de los sectores industria nacional con mayor grado de incorporación de tecnología, como lo son la industria farmacéutica y agroquímica, con fuerte componente de empleo calificado e incidencia en intereses vitales como lo son el acceso a los medicinas por la población y la salud pública. Está demostrado que los productos y en especial los medicamentos con patente tienen un mayor precio que los que no poseen protección. Además de que las patentes dan a su titular una monopolio que le permite decidir a quién, cuándo y a cuánto vende los productos.
La afirmación de que mayores niveles de protección por P.I. y especialmente patentes, constituye un estímulo efectivo al desarrollo tecnológico de los países en desarrollo ha sido desmentida por la experiencia.
La historia demuestra que los países que han logrado un desarrollo tecnológico han necesitado para hacerlo de bajos niveles de protección por PI, y recién adoptaron ese sistema en forma plena cuando se convirtieron en productores de tecnología. Los tratados de la OMC obligaron a los países en desarrollo a adoptar altos niveles de protección por PI coartando su libertad de manejar sus políticas de desarrollo tecnológico de acuerdo a sus realidades.
El PCT sigue siendo la herramienta usada por las transnacionales tecnológicas, y el avance de las empresas chinas que muestran las estadísticas de los últimos años, no hace más que confirmar (al igual que lo que ocurrió con Japón y luego con Corea), que para ser exitoso en la generación de tecnología, son necesarios períodos largos en los que se trabaja e invierte en la materia, y en los que se cuenta con amplias facilidades para acceder al conocimiento disponible resguardando bajos niveles de protección.
Es preocupante que se apoye la adhesión al PCT tomando en gran parte en el discurso de los países desarrollados favorables a sus corporaciones y las organizaciones internacionales que de hecho controlan como la OMPI; sin atender a las importantes posturascríticas a esa concepción, ni estudiar las condiciones reales y concretas del país.
Partido por la Victoria del Pueblo
Frente Amplio