Peligro Inflamable
Publicado el 18/12/15 a las 1:08 am
Por Angel Vera
En general, cerca de fin de año suele bajar el hervor de las polémicas. Sin embargo, este fin de año es inusual. La situación de ANCAP viene alimentando un debate por fuera y por dentro del Frente Amplio a partir de la Comisión Investigadora del Senado: Raul Sendic defiende su gestión y resalta el aporte de ANCAP al Sistema Nacional Integrado de Salud, la seguridad social y el subsidio al boleto; el Presidente de CUTCSA, Juan Salgado, cercano al círculo íntimo del Presidente Vázquez, descalifica a Sendic; Pepe Mujica descarga el déficit sobre el Ministerio de Economía; Danilo Astori critica duramente los gastos excesivos y la política de inversiones; el actual intendente de Montevideo, Daniel Martínez, comparece a la Investigadora como ex presidente del ente e informa sobre su acuerdo con el ex intendente Ricardo Ehrlich; la presentación de Sendic en la investigadora volvió a golpear al Ministerio de Economía y alcanzó al Ministerio de Trabajo y las estaciones de servicio; y para terminar el Presidente de la Unión de Vendedores de Nafta no se hizo responsable del déficit de ANCAP.
A través de los medios, este relato continuará alimentado por Blancos y Colorados sin tocar el asunto de fondo, la necesidad de una gestión transparente y transformadora.
La derecha colocó el tema en la agenda a sabiendas de que efectivamente es lisa y llanamente ineludible. Es más, se trata de un debate mal saldado en el VI Congreso Hugo Cores y un factor de fricción permanente desde la administración anterior. Ante la notoria gravedad de estos problemas, las mayores personalidades del Frente Amplio exponen sus diferencias a través del semanario Búsqueda o en las conferencias de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE). Detrás, en una segunda fila, algunos senadores y diputados secundan la disputa a veces seriamente, a veces caricaturalmente.
De este modo la agenda mediática programa la agenda pública. Instala este asunto como problema permanente y jerarquiza los eventos pertinentes. El monopolio mediático se nutre del Frente Amplio y, a la vez, la fuerza política sufre el desgaste consiguiente. El Frente Amplio en su conjunto deberá asumir estos desafíos en un escenario desfavorable, con desaceleración económica, con pronósticos de una fase descendente del ciclo económico y probablemente con nuevas tensiones sociales.
¿No estamos exponiendo las debilidades del Frente Amplio a través de sus más connotadas figuras y sus seguidores?
¿No estamos demostrando la necesidad de incluir democráticamente a los sectores populares organizados en la mejora de la acción del gobierno?
El cruce de facturas abiertas
De Mujica
Contador Astori:
Leyendo un semanario ahora y recién ahora me entero, que los costos de distribución de ANCAP «unos 800 millones» no fueron oportunamente reconocidos porque «con decisiones muy fundadas» resolvieron no trasladarlos a la sociedad. Como ejemplo negativo de gestión se pone un acuerdo con los estacioneros, «el propio costo de la empresa y el crecimiento de la masa salarial» que en «cinco años aumento un 50 % en términos reales», se anotan muchos errores de inversión y se fustiga «que a las empresas públicas se las defiende no tapando problemas».
Me veo obligado a preguntar:
1- ¿Por qué esas decisiones fundadas de economía no se volcaron en el Consejo de Ministros?
¡Porque no se planteo investigar si la cosa era tan mala! Los ministros de economía fueron siempre propuestos por el Sr. Vicepresidente y resulta que ahora, «todo es mala gestión de su directorio», por «los ruidos» que surgen de la Investigadora». ¿Si estaba pasando todo eso y lo sabían en economía y por ello no reconocieron los costos de distribución 800:000.000?
2 – ¿Por qué no lo planteo el contador Astori en el Consejo de Ministros? ¿Acaso trataba de ayudar a la empresa pública?
No entiendo como se ayuda a otros y se elude la propia responsabilidad. Debería además sumar otra pregunta ¿Qué hicieron en ANCAP y en su Directorio los representantes de la oposición? ¿No tienen «vela en este entierro»? Cuanto más pienso menos entiendo con las apariencias, habrá cosas que se escapan y algún día se explique todo esto. Pero serán asuntos que no tienen que ver con ANCAP.
a) Finalmente estoy y apoyare cambios pacientes que procuren la mejora.
b) No acompañaré proyectos de enajenación. El país tendrá petróleo pronto porque se buscó como nunca. Solo esto porque justifica el defender a esta empresa y sepamos que no es aterrorizando cuadros medios que mejoraremos la gestión.
Pepe.
De Astori
Compañero Mujica:
Recibí la carta abierta que me enviaste a través de todos los medios. Me parece lamentable este debate público. Nunca lo inicié yo. Primero el compañero Sendic, luego autoridades de Ancap y finalmente tú, coincidieron en un enfoque que considero totalmente equivocado y que responsabiliza al Ministerio de Economía por la crisis de esta empresa. Todas estas posturas tomaron estado público a través de los medios. Como comprenderás no puedo aceptar en silencio una interpretación que le hace mucho daño a la empresa y al país. De todas maneras he polemizado siempre con respeto y espíritu constructivo.
Al parecer has olvidado que, no en una, sino en diversas oportunidades, tanto el entonces ministro de Economía Fernando Lorenzo como yo mismo, planteamos en el Consejo de Ministros que no solo Ancap, sino también otras empresas públicas estaban “fuera de control”. Esa fue la dura expresión que utilizamos para calificar una situación que ya entonces considerábamos preocupante.
Te pido recuerdes una tensa sesión realizada en 2012, durante la cual Fernando y yo hicimos una extensa e intensa argumentación al respecto. Lamentablemente nuestros planteos fueron inútiles. No obtuvimos ninguna respuesta ni percibimos la más mínima reacción, ni tuya ni de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto que, te recuerdo, es la institución especializada en el seguimiento y control de las empresas públicas. Es verdad que tuve influencia en la designación de los ministros de Economía.
En lo que respecta a las autoridades de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto no solo no la tuve sino que sus cargos de dirección fueron ocupados durante todo el periodo pasado por compañeros que no compartían la visión del Ministerio de Economía, en particular sobre las empresas públicas. De ello se deriva su falta de respuesta ante nuestros planteos.
En cuanto a tu actitud, la has venido a explicar tú mismo con recientes declaraciones en las que has admitido que invitaste a las empresas públicas a que invirtieran “todo lo que quisieran”. Te aseguro que no sonó a programa ordenado y coordinado. De todas maneras, no creo que tu indicación haya sido la de invertir de cualquier manera, sin control de costos y de resultados. Hay otras instituciones del Estado que durante el periodo anterior tuvieron experiencias exitosas al respecto. Nadie niega que había que invertir, como nadie puede desconocer que las inversiones de Ancap fueron, en general, muy malas, tanto por el enorme aumento que tuvieron los valores originalmente previstos, como por los resultados obtenidos.
A ello hay que agregar un incremento desmesurado, no solo de los costos de distribución sino también de los costos internos de operación. Hasta ahora, los evidentes problemas de gestión que existen no han sido corregidos. Estamos hablando de la marcha del país y de las empresas públicas, que mucho hemos defendido, seguimos y seguiremos defendiendo.
No hay mejor manera de hacerlo que reconociendo lo verdaderos problemas, admitiendo errores y haciendo los cambios necesarios para administrarlas de acuerdo con el interés nacional. Tendremos que hacer todos un gran esfuerzo al respecto. En tus más recientes declaraciones señalaste que te piden unidad. Creo que todos los frenteamplistas nos la tenemos que pedir y además practicar. También dijiste que no te llevan con el poncho, lo que me parece muy bien. Con el mayor respeto te digo que a mí tampoco.
Danilo Astori
