Internas frenteamplistas y debates.
Publicado el 10/04/12 a las 10:22 am
Pablo Anzalone, Secretario general del PVP-567- Frente Amplio
Las líneas de acción a llevar adelante como fuerza política en el próximo período y las formas de participación de los frenteamplistas, son, en nuestra opinión, las dos cuestiones centrales del debate actual hacia las elecciones internas.
Líneas de acción del Frente Amplio
Venimos de una etapa donde el Frente ha reducido su capacidad de acción política a la gestión gubernamental, empobreciendo su vínculo con la población y su iniciativa política en temas centrales. La fuerza política tiene tiempos y dinámicas distintas a la gestión de gobierno. Son roles diferentes, complementarios, que no deben interferirse. No es posible discutir cada aspecto de la labor institucional en los ámbitos partidarios, aunque sí es imprescindible la información más amplia y corresponde el debate y la decisión partidaria de aquellos elementos nuevos que definen rumbos estratégicos. El eje vertebrador de la labor de gobierno es el programa de la fuerza política y aún entendiendo que su implementación no es algo lineal, el compromiso de fondo es ese.
Cuando hablamos de líneas de acción política nos referimos a asumir temas como educación, salud, vivienda, seguridad pública, y otros, para desarrollar una labor hacia la gente y con ella, campañas que promuevan un enfoque de izquierda, transformador, involucrando a la población en los procesos de cambio, escuchando y también informando, impulsando la participación ciudadana. Los derechos de los niños y los jóvenes, por ejemplo, debería ser el eje de una campaña política y social, donde el saber académico se combine con iniciativas que comprometan a las familias y la comunidad para proteger esos derechos. Se trata de enfrentar la campaña de criminalización de los jóvenes y la baja de la edad de imputabilidad, pero sin defender el status quo actual, impulsando una propuesta positiva. Necesitamos crear un nuevo pacto intergeneracional que corrija las profundas inequidades de la sociedad actual.
Denunciar las desigualdades que se reproducen hoy, luchar contra la fragmentación social, contra el predominio de valores competitivos, consumistas, excluyentes, discriminadores, es una tarea de la fuerza política. La violencia contra mujeres y niños, por ejemplo, deja todos los años un saldo inaceptable de asesinatos, pero aún más allá afecta muy hondo las posibilidades de desarrollo humano de muchos miles de personas. El Frente debe apoyar las políticas de cambio promovidas por su gobierno, informando sobre ellas, impulsando la participación social más amplia, exigiendo acciones más profundas cuando corresponda.
En lugar de resignarnos a las correlaciones de fuerza que nos limitan en la profundización de los cambios, de esta forma, actuamos para modificarlas, para elevar las miras, para gestar las confluencias sociales necesarias, para construir el poder ciudadano que las sustente. Construir el bloque social de los cambios es una idea fuerza central de la estrategia aprobada en 2011 por el Frente. De eso se trata.
Una reflexión política y programática hacia el futuro
Al mismo tiempo la fuerza política debe trabajar en el proyecto estratégico de país. A fines de 2013 un nuevo Congreso Programático del Frente aprobará el programa de gobierno 2015-2020. Dicho programa no puede ser la simple continuidad de las políticas aplicadas desde 2005, porque la realidad ha cambiado y lo ha hecho para mejor. Se requieren propuestas más audaces, que apunten a objetivos estratégicos más profundos, que no estábamos en condiciones de encarar en el 2004 ni en el 2009. Para llegar a esas propuestas necesitamos enriquecer la reflexión estratégica del Frente, por un lado a mediano plazo pensando colectivamente en el Uruguay del 2025 y también en el largo plazo con todos los componentes ideológicos que ello implica.
Si dejamos que el debate sobre educación se limite a los resultados de las pruebas Pisa, al Promejora o al estado edilicio de los locales, estamos omitiéndonos en las grandes estrategias educativas, en la reformulación y en la democratización del sistema educativo con la participación de estudiantes, familias y comunidad, en la promoción de un nuevo modelo pedagógico emancipador. Si permitimos que la salud se discuta a partir del episodio de los enfermeros asesinos o de los problemas de gestión de ASSE, no vamos a ayudar a la sociedad a levantar las miras hacia una salud diferente. Si la seguridad pública queda atrapada en el reclamo ciudadano y mediático de mas presencia policial, penas más severas, cárcel para más personas y más jóvenes, no podremos proyectar y trabajar para una sociedad más segura.
Pero además la izquierda no puede renunciar al debate sobre las grandes propuestas de sociedad. Decíamos en un documento del 2010 que la principal idea- fuerza del socialismo del siglo XXI es, en nuestra opinión, la democratización radical de la sociedad y el Estado, profundizando el sistema democrático hacia un régimen participativo. Saldando cuentas con las experiencias del socialismo en el siglo XX, criticando y autocriticando, sin recetas, pero volviendo a reflexionar sobre una sociedad poscapitalista. Sin pretender ideas acabadas, sino apostando a un debate enriquecedor, fermental, disparador de nuevos aportes, aprendiendo de las experiencias actuales de la izquierda en América Latina.
Formas de participación de los frenteamplistas
Al referirnos a las formas de participación de los frenteamplistas hablamos de innovar en formas de hacer política que se han ido institucionalizando, alejando al Frente de los sectores populares que son su base social y que no le permiten seguir ampliándola. Fortaleciendo la columna orgánica de comités, coordinadoras y departamentales, abriéndose a otras formas que vayan tejiendo múltiples redes, innovando en la utilización de los instrumentos informáticos de comunicación, pero también con el mano a mano, la reunión, la asamblea. Con planes de trabajo claros, que nos permitan ir creciendo como organización política, por encima de cada sector.
La participación política de masas, como la social, no son líneas ascendentes y continuas. Hay períodos de auge y de reflujo, existen victorias y también derrotas. Pero si no forma parte central de nuestra estrategia está claro que nunca lo lograremos. Solo una visión muy ideologizada puede sostener que eso ya no importa porque los medios de comunicación y el funcionamiento institucional resuelven el quid de los procesos de cambio. La supuesta modernidad de este tipo de política se reduce a volver al vínculo más tradicional de representante/representado. Utilizando las dificultades reales como argumento para sentenciar el fin de una concepción distinta de la política, donde la gente sea protagonista. Por el contrario necesitamos un Frente más cerca de la gente.
A todos estos temas nos referimos con líneas de acción y formas de participación de los frenteamplistas para el próximo período.
Tomado el 10/4/12 de http://www.diariolarepublica.net/2012/04/internas-frenteamplistas/
arlette
Abr 12th, 2012
Elecciones internas
Los buenos fines no pueden realizarse por medios inadecuados.»
Aldous Huxley
http://www.voces.com.uy/editoriales/internas%C2%BFguerrasucia
Faltan cuarenta y cinco días para las elecciones internas.
Se lanzan los cuatro candidatos al ruedo electoral.
Durante un mes y medio, los vamos a ver hasta en la sopa.
Ya estuvieron en las domas y en la vuelta ciclista.
Seguro que alguno cae por el estadio a ver a Paul.
Van a salir por radio, por twitter, televisión y Facebook.
Lucirán sus rostros con fotoshop en los muros ciudadanos.
Harán promesas, planes, estrategias y muchos discursos.
Cada uno con su perfil y trayectoria buscará adhesiones.
Dicen que harán una campaña unitaria y fraterna…dicen.
Dicen que quieren mejorar al Frente Amplio…dicen.
Dicen ser la garantía del cambio imprescindible…dicen.
Dicen muchas cosas y que harán muchas más…dicen.
Lo que no dicen es que hay una lucha sectorial brutal.
Y que todos juegan en mayo con la vista puesta en el 2014.
Es válido, las ambiciones de poder son parte de la política.
Y cada grupo se considera dueño de la verdad revelada.
¿No es ese sentimiento la razón última de su existencia?
Pero a nuestro criterio, el fin no justifica los medios.
Y desde ya anunciamos que no nos prestaremos a
ningún tipo de operación política, ni a favor ni en contra.
Es bueno que todos los compañeros lo tengan claro.
Esta publicación es tan heterogénea como el Frente.
Y cada uno patea libremente para donde se le ocurra.
Y no nos vamos a callar hipócritamente ante la maniobra.
No aceptaremos que atrás de la supuesta dulzura se
haga guerra sucia y se pidan cabezas de periodistas.
No se juega con el trabajo de nadie pidiendo la censura.
Que la campaña no se vuelva manía persecutoria y
que los responsables se persigan inventando operetas.
No hace falta que demos nombres o datos o partidos,
los implicados bien lo saben, porque son reincidentes.
Pero esa actitud no es fraterna y mucho menos socialista.
————————————————————————-
Elección en el FA ¿MÁS DE LO MISMO? Por Hoenir Sarthou
publicado a la(s) 30/03/2012 07:18 por Semanario Voces
http://www.voces.com.uy/articulos-1/eleccionenelfa%C2%BFmasdelomismoporhoenirsarthou
Cuatro candidatos fueron admitidos por la estructura orgánica para competir por la presidencia del Frente Amplio.
Demasiados candidatos… o muy pocos, según se mire.
Si las candidaturas pretenden reflejar la diversidad de posturas ideológicas y de organizaciones político-partidarias que conviven en el Frente, los candidatos son muy pocos.
Pero, si se pretende que la elección refleje la real correlación de fuerzas existente en la interna frenteamplista, son demasiados
.
En el Frente, lo tradicional era la heterogeneidad.
Fue siempre una organización compleja, compuesta por partidos doctrinarios, sectas históricas de la izquierda, viejas listas emigradas de los partidos tradicionales, agrupamientos ocasionales en torno a figuras relevantes y un enorme número de militantes y adherentes independientes.
Por eso, históricamente, la estructura orgánica se integró en base a criterios de representación no demasiado conmensurables, haciendo lugar, a la vez, a representantes de los grupos políticos, a individualidades influyentes y a representantes territoriales, provenientes de los comités de base y las coordinadoras.
Sin embargo, desde hace algún tiempo, esa heterogeneidad tiende a simplificarse, a ser “aspirada”por dos grandes polos: el MPP y el Frente Líber Seregni (FLS), o, caricaturizando un poco, por el “mujiquimo” y el “astorismo”.
Alrededor de ese tenso eje, compuesto por el MPP y el FLS, gira la orgánica frentista y sobreviven, es cierto, algunos partidos y decenas de grupos, listas, agrupaciones y frentecitos que porfían en mantener su identidad, aunque buena parte de ellos sean simples “sellos”, sin existencia ni significado político real.
Hay dos grandes razones para esa polarización.
Una es de fondo. La composición social del Frente Amplio es una clara alianza entre capas medias de la población y otros sectores, social, económica y culturalmente más desfavorecidos e incluso semimarginales.
Esa alianza no puede menos que manifestarse en sensibilidades, discursos y aspiraciones diferentes.
La otra razón, circunstancial, es que la llegada del Frente al gobierno obliga a traducir las vagas intenciones programáticas en medidas concretas, en las que es más difícil disimular las diferencias, tanto de sensibilidad como de intereses.
El astorismo, en el que predominan las capas medias, se jacta de manejar exitosamente la política económica, que privilegia a la inversión privada extranjera y, en el fondo, más allá de algunas políticas sociales, confía en el “derrame” de la riqueza.
Desde el MPP, en el que predominan los sectores sociales menos favorecidos e incluso alguna sensibilidad marginal, se emiten periódicos gestos y/o “bufidos” de disconformidad en reclamo de políticas más populares, aunque el sector no logra proponerse ni plasmar una gestión económica alternativa.
En torno a estos dos grandes bloques tienden a alinearse los otros partidos y grupos del Frente.
Incluso una figura como Tabaré Vázquez debe inclinarse a menudo hacia uno u otro bloque, como lo hizo, hacia el astorismo, en las elecciones internas de 2009
Sin embargo, los dos sectores se necesitan.
El control de la economía, que es el principal crédito del FLS, sería imposible sin los votos y el aval político del mujiquismo.
Y parece evidente que el MPP no se atreve a asumir por sí la gestión económica, ni siquiera para imprimirle un sesgo más popular.
Es decir que ninguno de los dos, por sí solo, puede por ahora ganar elecciones ni gobernar
Desde esta perspectiva, la próxima elección (en la que presumiblemente votarán más los militantes activos que los simples adherentes) tiene fuertes chances de convertirse en una nueva pulseada “fraterna” entre los dos bloques. Las candidaturas de Mónica Xavier, socialista pero apoyada expresamente por el FLS, y de Ernesto Agazzi, tupamaro y por tanto del riñón del MPP, expresan esa tendencia.
Es probable que el FLS, al hacer alianza con el Partido Socialista, haya jugado mejor sus cartas electorales.
Además, en materia de imagen, cuenta con la ventaja de que el equipo económico es visto como competente y exitoso (“eficaz para hacer lo que hace”).
En cambio, la gestión en otras áreas del Estado–salvo por algunos chispazos, a menudo del propio Mujica- deja dudas sobre la capacidad del MPP para definir y ejecutar políticas y para manejar la institucionalidad.
Resta preguntarse dos cosas.
La primera es si la postulación de un miembro del MLN, sin alianzas con otros sectores, es un error estratégico del MPP o es señal de que el sector renuncia a controlar a la vez la presidencia de la República y la del Frente Amplio.
La segunda pregunta es si la candidatura de Enrique Rubio, o la de Juan Castillo, lograrán una convocatoria significativa de frenteamplistas que se resistan a la polarización planteada.
Por el momento, cabe pensar que la presidencia del Frente quedará en manos de uno de los dos grandes bloques.
Eso, más allá de ajustes de cuentas sectoriales, augura pocos cambios en la gestión del Frente y en la de gobierno.
En definitiva, más de lo mismo.
http://www.voces.com.uy/articulos-1/eleccionenelfa%C2%BFmasdelomismoporhoenirsarthou
tomado de VOCES DEL FRENTE